Tres aulas prefabricadas más acaban de llegar al IES Antonio Menárguez Costa, de Los Alcázares, pero sin conexión eléctrica, ni mobiliario ni pizarras. La indignación ha cundido entre los padres y madres de alumnos, que se disponen a organizar protestas ante la sede de la Consejería de Educación. Ya son 8 las aulas prefabricadas en este centro, que abrió hace 25 años para 450 alumnos y ya son 980 los estudiantes que cursarán sus estudios este año.
"Han llegado las aulas absolutamente en blanco", señala la presidenta de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos, Conchi Sánchez. Asegura que no entiende "por qué se niegan a ampliar el centro o a construir otro, si pagan un elevado alquiler mensual por cada aula". Fuentes de la Consejería informan de que el alquiler de cada aula prefabricada suma 1.000 euros al mes, incluido montaje y mantenimiento, lo que supone casi cien mil euros al año solo en los arrendamiento de estas casetas, ya que el instituto alcazareño cuenta con 8 en total.
Las tres últimas en llegar carecen de todo lo esencial para impartir clase. La Consejería asegura que la equipará "en cuanto sea posible", pero a los padres y madres de alumnos ya se les acaba la paciencia. Los estudiantes llevan ya varios años dando clase en la biblioteca, en el laboratorio, en el taller de tecnología e incluso en la sala de usos múltiples.
La masificación del centro no solo impide que haya ciclos de Formación Profesional, pero tampoco nos quieren poner un autobús para que los alumnos se desplacen a los centros de Torre Pacheco o San Javier donde sí los imparten. A los alumnos se les va el recreo entre hacer cola para el aseo y para pedir en la cantina. Los barracones ocupan cada vez más espacio en el patio, con lo que favorece las aglomeraciones. "Y cuando llueve, se forma alrededor de las aulas un barrizal", explica la presidenta.
