El viento pone a prueba a las tripulaciones del Carabela de Plata

El viento puso a prueba la habilidad de las tripulaciones participantes en el XIX Trofeo Carabela de Plata en el Club Náutico Mar Menor de Los Alcázares. Una jornada soleada para el Gran Premio Ayuntamiento de Los Alcázares, en la que el viento retó a los navegantes.

La séptima prueba del XIX Trofeo Carabela de Plata, Gran Premio Ayuntamiento de Los Alcázares, fue muy favorable para los regatistas pues el viento estable de Nordeste dirección 040, rozó los veinte nudos. Los patrones de la amplia flota de embarcaciones de la clase cruceros y J-80 sacaron una vez más a relucir sus buenas dotes de navegación junto con sus tripulaciones, tanto hombres como mujeres, ante estas condiciones climatológicas. Navegar con este viento solo se consiguió anteriormente en la prueba inaugural de este Trofeo Carabela, disputada en el mes de noviembre del pasado año. El Comité de regatas estableció el campo de competición de un barlovento a sotavento, de 11,4 millas para los cruceros de las clases RI2 y RI3, mientras que para los RI4 y Promoción fue de 6,3 millas. Y para los J-80, barcos con una eslora de ocho metros, tuvieron que cubrir las 4,2 millas en cada una de las dos mangas que disputaron. A las 12’22 horas se dio la salida oficial a las primeras embarcaciones con arreglo a su categoría, siendo el ‘Tronko’ de José María Meseguer, del Club Náutico Villa de San Pedro, el que menor tiempo invirtió en la jornada de ayer domingo que lo hizo en 1h.45’.

Mofletes, Nabel II y Debegur abandonaron la competición, los dos primeros para evitar roturas, y este último por una rotura antes de comenzar las pruebas. Durante las diferentes salidas, como en las tomas de baliza, se vivieron momentos de tensión, destacando el incidente ocurrido en la clase RI4, entre las embarcaciones Isla Marola, Náyade y Saltón, por no dejar suficiente interior y rozar el primero la boya.

En J-80 el ‘Mapfre’, del R.C.N. Santiago de la Ribera, con Carlos Martínez a la caña, demostró su especial clase en esta competición al llegar en primera posición en ambas mangas, lo que le lleva a afianzarse como líder en la clasificación general. 

Al término de la regata tuvo lugar una comida, concretamente un caldero, en las instalaciones del Club Náutico Mar Menor, anfitrión de este Trofeo, con la participación de regatistas, patrones, jueces y familiares. La empresa Altamar Servicios realizó una demostración de material de salvamento en caso de naufragio.

Todo queda a la espera de la octava y última prueba del XIX Trofeo Carabela de Plata, Gran Premio Ayuntamiento, que tendrá lugar el 4 de mayo, fecha en la que se procederá a la entrega de trofeos a los ganadores.