La alerta amarilla que ayer se activó por vientos costeros no se quedó solo en amenaza. La fuerza del aire descolgó uno de los grandes carteles indicadores de la autovía Cartagena-Alicante a la altura de Los Alcázares y provocó momentos de pánico entre los automovilistas, que acertaron al esquivar la enorme estructura caída sobre los viales, aunque en los primeros minutos causó una retención en la autopista costera.