La historia de la humanidad en plastilina, desde el hombre de las cavernas hasta la parada del autobús repleta de la fauna urbana actual. Desde que La Plastihistoria de la Humanidad se inauguró el pasado 6 de marzo, por el Museo Arqueológico Municipal Enrique Escudero de Castro han pasado a visitar la exposición temporal 3.759 personas, un balance más que positivo en cuanto a número de visitantes en un solo mes.
Desde el Paleolítico hasta nuestros días, la muestra ofrece en tono cómico los momentos que han sido claves en el devenir de la humanidad, como el poder del Imperio Romano, la Revolución Francesa, el descubrimiento de América o la llegada del hombre a la Luna, así como las civilizaciones que han ido dejando su huella a lo largo de los siglos, desde los cavernícolas o los fenicios hasta las tribus urbanas que pueblan ahora la ciudades.
Se trata de un exposición para disfrutar en familia, ya que gusta tanto a pequeños como a grandes, y se puede visitar hasta el 27 de junio. Este proyecto llega a Cartagena de la mano de la Fundación Educa, con el objeto de enseñar la historia de manera amena y simpática.
La muestra La Plastihistoria de la Humanidad, que permanece expuesta en el Museo Arqueológico Municipal Enrique Escudero de Castro desde el 6 de marzo, aún puede visitarse hasta finales de junio.
Un buen método para que los niños aprendan de manera divertida la Historia de la Humanidad que se narra cronológicamente en la exposición con un tratamiento diferente y atractivo, explicaba la concejal de Cultura, Rosario Montero, durante la presentación. Al acto también asistía la directora del Museo, María Comas, y el secretario de la Fundación Educa, Jorge Peláez.
Es esta Fundación la que está detrás de este original proyecto que nació hace 3 años con el objetivo de fomentar la educación entre los jóvenes, una de las principales ideas por las que se creó Educa, un colectivo formado por profesores jubilados. Plastiart se encargó de llevar a la práctica estas figuras diseñadas exclusivamente por plastilina, salvo algunos detalles en madera o musgo. Bastaron 3 meses para elaborar estas 20 vitrinas que conforman la exposición.
Desde la época del Paleolítico hasta la globalización de estos días se muestran en Plastihistoria, una colección en la que el visitante puede encontrar desde un barco fenicio, el caballo de Troya, el descubrimiento de América. No queda ningún detalle al azar, como los calcetines que actúan de bandera de la I Guerra Mundial o los huevos y el bacon que se comen los vaqueros en el Oeste. Hay que estar muy atento para disfrutar de cada escena, por lo que muchos vienen varias veces a visitar la muestra, confesaba Jorge Peláez, de Fundación Educa.
El tono cómico también aparece en Plastihistoria con el fin de que los pequeños aprendan nuestra historia de manera amena y con una sonrisa puesta en la cara. Por ejemplo, un pícaro Goya que dibuja a una Maja vestida como modelo a su Maja Desnuda o una pintura de una televisión en el Paleolítico.
No sólo los pequeños podrán disfrutar de esta exposición temporal del Arqueológico, sino también los mayores, quienes repasarán algunos de los momentos claves de la Humanidad. Además, como ya es habitual, los escolares participarán en los talleres didácticos que se organizan para fomentar el aprendizaje. Uno de los talleres es el que organiza la Federación de Cartagineses y Romanos a lo largo del mes de mayo para conmemorar su 25 aniversario. A los alumnos de Primaria, Secundaria y Bachillerato se les invita a participar en esta actividad que consiste en recrear los ejércitos de la Guerra Púnica a través del modelaje y que incluye, además, la filmación en vídeo con la técnica del stop motion.