La Plataforma de Afectados por las Hipotecas del Mar Menor recibe cada semana alrededor de 12 nuevos casos de familias con amenaza de desalojo de su vivienda por falta de pago. «Está aumentando porque ahora están llegando muchos casos de familias a las que se les acaban los periodos de carencia que les dieron los bancos, de pronto ven que les suben la letra y se ven obligados a hacer daciones en pago», explica la portavoz de la PAH, Charo Tárraga. Han logrado numerosos acuerdos de alquileres sociales para las familias afectadas, aunque no siempre es fácil. Ayer por la mañana se decidieron a ocupar la oficina de la sucursal de la Caja Rural Central en la pedanía de El Mirador para forzar la dación de pago para una pareja en apuros.
A las reuniones que celebran cada semana, los miércoles en el Centro de Ocio Juvenil de San Pedro y los jueves en el Espacio Solidario de San Javier -ambas a las 6 de la tarde-, se unen una docena de casos nuevos con problemas relacionados con las hipotecas y la escasez de recursos.
«En el último mes hemos parado 12 desahucios en la zona», asegura Pepe Espinar, de la PAH.
