El Pleno de la Corporación de San Javier le dijo ‘no’ a Vox sobre su petición de retirar los libros de educación sexual de la Biblioteca. Una oposición casi unánime, ya que los dos concejales de Pleamar se abstuvieron.
Luengo: «No vamos a hacer censura»
El PPfue rotundo en su desacuerdo con la moción de Vox. «Se llama libertad para acompañar a sus hijos y elegir los libros que quieran. Si no les gusta que sus hijos lean estos libros, elijan otros», afirmó el alcalde, José Miguel Luengo. «No vamos a hacer censura. En los 8.888 libros que tiene la Biblioteca, pueden venir ustedes a recitar todos los párrafos que no les gustan, pero esto es muy fácil, se llama libertad», les dijo.
David Martínez: «Están catalogados por pedagogos y psicólogos»
El concejal de Cultura, David Martínez, recordó que «estos libros llegaron a la Biblioteca entre los fondos de los premios nacionales de animación a la lectura y están en muchas otras bibliotecas». Sobre los títulos de educación afectivo sexual, aseguró que «están catalogados por psicólogos, psiquiatras y pedagogos».Les aclaró que «ustedes se erigen en guardianes de la moral, pero deben saber que un menor de 14 años debe ir acompañado de sus padres para acceder al préstamo de un libro». Se negó a crear una comisión que seleccione los títulos que se ponen en la Biblioteca a disposición de los menores y alerto de que «lo peligroso es crear una comisión política para que diga lo que se puede o no se puede leer, sea del signo que sea».
Aurora Izquierdo: «Preocúpense de que no tenemos psicólogo infantil desde hace meses»
En su respuesta a la moción de Vox, la concejal del PSOE, Aurora Izquierdo, les recordó que «la educación afectivo sexual es clave para el desarrollo de la infancia y la adolescencia». «El acceso a material educativo es vital», les dijo. La edil aludió a «los estudios que aseguran que la educación afectivo sexual previene la violencia de género y la discriminación, dota de herramientas para detectar los abusos, reduce los embarazos no deseados y las enfermedades de transmisión sexual». «El silencio como forma de educación transmite mensajes implícitos, lo interpretan como tabúes, lo llenan con sus interpretaciones. La tecnología y los pedófilos hacen el resto», afirmó. «Preocúpense mejor de que estamos sin psicñologo infantil y psiquiatra desde hace meses. preocúpese por Whatsapp y por Meta. Coja los libros y quémelos en la plaza pública, que es lo que les queda», les respondió la edil.
Pleamar: «Que los niños los lean en presencia de menores»
El grupo independiente Pleamar se abstuvo en la votación de la propuesta de Vox. «Si se mantienen estos libros en la Biblioteca, que los menores estén siempre acompañados por adultos que supervisen los contenidos», dijo la concejal Sandra Martínez en una reveladora escena. La avería de su micrófono la llevó a intercambiar la silla con una concejal de Vox, de modo que los dos grupos se intercalaron durante unos minutos.
Cantabella: «Sirve para que los menores sepan si sufren abusos»
El concejal de Podemos, Matías Cantabella, destacó que «la educación afectivo sexual sirve para que los menores sepan que hay un mundo cada día más diverso en el que cabemos todos, todas y todes». «Sobre todo sirve para que los menores sepan detectar si están siendo víctimas de abusos dentro o fuera del ámbito familiar», afirmó. Acusó a Vox de «separar a los niños según su raza, su color, su religión, su lengua o su país de procedencia, y lo siguiente será separarlos por barrios y guetos».