La subida salarial del alcalde y los concejales de San Javier tuvo anoche su respuesta en la calle. Alrededor de 400 vecinos -según la estimación de la Policía local- hicieron una sonora pitada y gritaron lemas contra el incremento de las nóminas de los políticos. Pancartas que denunciaban lemas clásicos como ‘No hay pan para tanto chorizo’ y otros creados para la ocasión (‘Estamos un 40% más indignados’) poblaron la plaza de España una hora antes del Pleno municipal en el que se debía debatir la propuesta del PSOE para desactivar la subida salarial y destinar el incremento a la ayuda de las familias más necesitadas. Hubo manifestación y hubo debate, pero el PP logró imponer la subida gracias a la abstención del concejal tránsfuga que, al igual que en el pleno que aprobó el incremento (el pasado diciembre), permitió que el voto de calidad del alcalde rompiera el empate.
Los jóvenes convocantes movieron la convocatoria por las redes sociales y lograron que alrededor de 400 personas acudieran a la plaza de España de San Javier a mostrar su rechazo por la iniciativa del Gobierno municipal, que desde este mismo mes cobrará hasta un 40% más en sus retribuciones.Los videos del polémico pleno han tenido un efecto viral y hasta las cadenas de televisión nacionales han emitido la noticia. La repercusión de los nuevos salarios de la Corporación municipal atrajo hasta la manifestación de anoche a varias cámaras de televisión, entre las que se encontraba un equipo del programa de Ana Rosa Quintana.
Miembros de la Plataforma de Afectados por las Hipotecas y de partidos políticos como PSOE, Ciudadanos y Podemos engrosaron la protesta, en la que sonaron a través de los megáfonos lemas combativos contra el incremento salarial de los políticos al tiempo que recordaban las recientes inundaciones y los daños que han causado en numerosas familias. El líder regional de Podemos, Óscar Urralburu, criticó «la subida de salarios de los concejales mientras hay una mayoría social sufriendo».
Así lo recordaron en un manifiesto que los convocantes leyeron, megáfono en mano, en la puerta del Consistorio: «Los vecinos de San Javier consideramos que el aumento de las retribuciones es una nedida vergonzosa que no se adapta a la realidad social que se vive en nuestro país, así que instamos al gobierno local y a la oposición a que se pongan de acuerdo y destinen ese donero a otros fines que beneficien a toda la comunidad».
Los manifestantes llenaron después el salón de plenos municipal para asistir al debate sobre la polémica subida. Algunos abucheos al concejal tránsfuga y exclamaciones aisladas fueron las únicas incidencias de la concentración, ya que el público esperó las largas horas de debates municipales hasta llegar a la moción socialista de los salarios, que figuraba casi al final del orden del día, entre los asuntos de urgencia.
Todos los grupos políticos, incluido el PP votaron a favor de la urgencia de la moción «para que se pueda debatir», argumentaron desde el Gobierno local. La propuesta socialista, que instaba a destinar los casi 400.000 euros que supondrá la subida salarial de los concejales a ayudar a familias necesitadas, solo fructificó en un cruce de reproches entre los portavoces, ya que finalmente se convirtió en papel mojado cuando el concejal tránsfuga, el ex edil socialista Santos Amor, se abstuvo y propició de nuevo el empate técnico entre el Grupo Popular y la oposición. Como indica la ley, el voto de calidad del alcalde termina por imponer la postura defendida por el Equipo de Gobierno, con lo que la subida salarial recibió su segundo espaldarazo tan solo un mes después de haberse aprobado en la misma sala y con el mismo resultado de votos. Una efectiva jugada de tablero que ya le ha permitido al PP aprobar -gracias a la abstención del tránsfuga- propuestas decisivas, como los presupuestos municipales y la subida de los sueldos.
En la arena del debate, los portavoces enturbiaron el argumentario político con un fuego cruzado de acusaciones sobre el pasado, de manera que la mayor parte del diálogo al que asistió el público se basó en datos de hace una década, de conversaciones mantenidas puertas adentro, de comentarios escuchados en reuniones entre políticos y en intentos de desacreditarse mutuamente. Un debate de bajo perfil que logró su objetivo: llegar a su fin sin tener que destapar el tema de fondo (si realmente es procedente subir los salarios de los concejales) y sin que los asistentes supieran con claridad qué había pasado exactamente.
«Nos parece sin sentido, insolidaria y escandalosa cuando más de 2.000 vecinos nuestros siguen en paro y, el primer ciudadano que es el alcalde debería dar ejemplo pero se sube el sueldo un 30%», reprochó el portavoz de Ganar San Javier, Matías Cantabella, quien acusó al PP de «manchar el nombre de San Javier en toda España».
«Solo pedíamos consenso y diálogo», señaló el portavoz de Ciudadanos, Antonio Murcia. El edil recordó que «no podemos defender uan subida salarial cuando se suben los impuestos», indicó en relación a la aprobación reciente de la tasa de 5 euros al mes del Servicio de Recogida de Residuos. El portavoz naranja advirtió de que «aún no se acabado la crisis y, aunque defendemos que los políticos tienen que estar bien remunerados, el PP va de víctima y no tiene nada de víctima».
«Basta de arrogancia y prepotencia. Pidan perdón y rectifiquen», pidió el portavoz socialista, José Ángel Noguera. Defendió que «la subida debería ser por consenso y no en una situación recién salida de unas inundaciones». «A la política se llega con verdades y sin revanchismos. A lo mejor algunos de ustedes estarían trabajando a 6 euros la hora, como muchos jóvenes ahora, si no estuvieran aquí», echó en cara al PP.
El portavoz popular, Carlos Albaladejo, centró su defensa de la subida salarial en lo que cobró el PSOE en su única legislatura en el gobierno, de 2007 a 2011. «Van perdiando votos y apoyo social al mismo ritmo que pierden concejales. Si no se ven capaces de mantenerse unidos, no culpen a los demás», le dijo al Grupo Socialista. Albaladejo afirmó que «hemos levantado el castigo que consistió en la oposición divirtiéndose bajando los sueldos a los concejales, de manera que hubo algunos que se quedaron cobrando 500 euros y sin Seguridad Social».
«El Equipo de Gobierno va a costar al pueblo de San Javier un 23% menos que hace 10 años, cuando el Gobierno tripartito tenía tres asesores, mientras el PP solo tiene un puesto de confianza, la secretaria del alcalde», aseguró Albaladejo. El portavoz explicó que «en la época del tripartito había proveedores que ni querían trabajar con el Ayuntamiento porque tardaban año y medio en pagar, mientras ahora se paga a 10 días, hemos bajado el IBI un 13% y tenemos las cuentas más saneadas de la historia». «Nos hemos sentido amenazados, incluso de muerte», denunció el portavoz del PP.
El ‘alcaldeliks’, Carmena y Venezuela
Tras el farragoso cruce de acusaciones entre el PP y el PSOE sobre los salarios de una época y de otra, comentarios escuchados a puerta cerrada y un intercambio de datos que no quedó claro, el portavoz de Ciudadanos, Antonio Murcia, retornó el debate a la actualidad: «En esas épocas ni siquiera estábamos nosotros, pero usted parece el ‘alcaldeliks’ que lo sabe todo, que sabe lo que se habla en todas partes». Le recordó al PP que «si gobiernan es gracias a Ciudadanos, y el PP controlado por Ciudadanos es el que ha bajado el IBI, ha quitado la tasa de apertura de negocios y otras medidas positivas para los ciudadanos, el PP de antes, pero el de ahora es el PP comprado por Santos Amor«. «Antes nuestra marca era el Festival de Jazz y ahora van a ser los sueldos», dijo.
Con el salón de plenos más animado que nunca, el ‘gallinero’ se mantuvo atento al debate político. Cuando el portavoz popular echó mano de los sueldos de Manuela Carmena y Ada Colau, las alcaldesas de Madrid y Barcelona respectivamente, al fondo de la sala se escuchó: «¡Y Venezuela!». Salvo algunas trifulcas verbales entre cercanos al PP y manifestantes, y algunos gritos de asistentes al abandonar la sala, la Policía municipal no tuvo que intervenir.
Como en la votación de diciembre, que aprobó la subida de salarios, el pulgar decisivo volvió a estar en la mano del concejal no adscrito, Santos Amor, que centró la mayor atención de la noche en el momento de manifestar su voto: «Me voy a mantener en mi postura, que se remonta al inicio de la legislatura, cuando la oposición tuvo como único fin ahogar y machacar al Equipo de Gobierno, así que me voy a abstener».
Manifestantes con una de las pancartas que mostraron en la concentración contra la subida salarial de San Javier.
El portavoz de Ganar San Javier, Matías Cantabella, a la derecha, con algunos de los manifestantes
Miembros de la Plataforma de Afectados por las Hipotecas Mar Menor, en la protesta.
Pancartas y silbatos en la manifestación de anoche en la plaza de España de San Javier.
Los jóvenes convocantes de la portesta leyeron un manifiesto en la puerta del Consistorio de San Javier
El salón de plenos, repleto de asistentes, para escuchar el debate sobre los polémicos salarios de los concejales.