Retoques confirmados en la agenda de Alejandro Valverde para este 2019. El corredor de Las Lumbreras, segundo recientemente en el Tour de los Emiratos Árabes, realizará un inesperado alto en el camino por enfermedad. El físico le ha jugado una mala pasada y se ha borrado a última hora de la Strade Bianche y la Milán-San Remo. Retornará a la competición el próximo 25 de marzo, con motivo de la 99.ª edición de la Volta a Catalunya.
No hay motivos para arriesgar la salud. El murciano encaró enfermo los últimos días del Tour de los Emiratos Árabes, y ahora se tomará un merecido descanso que le llevará a perderse la Strade Bianche y la Milán-San Remo. Pese a este primer contratiempo del curso, las sensaciones son más que positivas. Valverde cerró su participación en los Emiratos Árabes con un segundo puesto en la general y una victoria de etapa, para agrandar así la leyenda de un ciclista para el que no parece pasar el tiempo. Camino de las 39 primaveras, Valverde se adjudicó en 2018 el maillot arcoíris, uno que pretende lucir en todas sus pruebas fetiche.
Corredor completo donde los haya, es capaz de rendir en pruebas de tan diferente perfil como la Volta, las clásicas de primavera y las carreras de tres semanas. Precisamente, la prueba catalana será la de su reincorporación al calendario de la UCI, con el objetivo en mente de ganar en suelo catalán por cuarta vez en su trayectoria deportiva tras las victorias ya cosechadas en 2009, 2017 y 2018. Poco después será el turno del Tríptico de las Ardenas, en donde aspirará a completar la trilogía con la única victoria que se le resiste: la de la Amstel Gold Race. Por algo es uno de los aspirantes a entrar primero por la meta de la Flecha Valona y la Lieja-Bastoña-Lieja en los mercados de Betfair, al sumar entre las otras dos carreras de las Ardenas un total de nueve triunfos. Con uno más, Valverde llegaría en el global al famoso número 10 que le permitiría igualar en el palmarés general con una leyenda de las dos ruedas como Eddy Merckx.
En lo que a las grandes se refiere, Valverde será la baza del Movistar Team de cara a la Vuelta España, tal vez su última oportunidad de igualar el resultado registrado en 2009 cuando se subió al peldaño más alto del podio. Aunque tratándose de Valverde, no se puede decir nunca, ya que tiene previsto seguir en activo hasta 2020 y eso puede significar un segundo intento el año que viene en la tercera de las grandes. Y como aclimatación a la Vuelta, correrá en breve el Giro de Italia como escolta de Mikel Landa. En otras palabras, su presencia en el Tour está casi descartada.
En pocas palabras, Valverde está temporalmente de baja, pero la temporada promete emociones fuertes. Quiere exhibir a lo grande el maillot arcoíris, el mismo que le acredita como campeón del mundo, y ha firmado su primer podio en su primera carrera del año. Además, le queda todavía el terreno favorable con la entrada en escena de las clásicas de primavera, sin descartar una buena actuación en la Vuelta.