Un descuido casi acaba en tragedia. Dos agentes de la Policía Local de Cartagena se convirtieron en héroes por un día al romper la ventanilla de un coche para rescatar a un niño de dos años. El menor, atrapado en el interior de un vehículo a pleno sol, sin duda habría sucumbido al calor extremo.
Una intervención de vida o muerte
La escena sucedió en el estacionamiento de un supermercado de Cabo de Palos. Eran las tres de la tarde, cuando el sol castigaba con fuerza. La madre del niño, que estaba comprando, lo dejó dentro del coche, con las ventanillas cerradas. «A su llegada, los agentes comprobaron que el niño no respondía a estímulos, por lo que fracturaron una ventanilla para proceder al rescate y, una vez fuera, lo trasladaron inmediatamente al interior del supermercado con el fin de aprovechar el ambiente refrigerado y estabilizar su temperatura corporal, mientras llegaban los servicios sanitarios», explicó el concejal de Seguridad Ciudadana, José Ramón Llorca. Según la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria, la temperatura interior de un vehículo expuesto al sol puede subir hasta 10 grados en 10 minutos, una cifra que da idea del peligro inminente que corrió el menor.
El personal de la Unidad Militar de Emergencias (UME) confirmó la gravedad de la situación del menor, aunque la velocidad de la intervención policial evito males mayores. El niño fue trasladado al Hospital Santa Lucía, donde se le aplicó tratamiento. Por su parte, la Guardia Civil instruyó las diligencias para esclarecer lo sucedido. La alcaldesa de Cartagena, Noelia Arroyo, ha propuesto felicitar a los agentes.
En resumen…
- Lugar de los hechos: Cabo de Palos, Cartagena.
- Sujeto de la información: Un niño de 2 años.
- Rescatadores: Dos agentes de la Policía Local de Cartagena.
- Medidas adoptadas: Fractura de ventanilla para el rescate y traslado inmediato al interior del supermercado.
- Situación: El niño no respondía a estímulos.
¿Por qué te puede interesar?
Este suceso resalta el riesgo de dejar a menores solos en vehículos, incluso por un periodo corto. Es un recordatorio de que las altas temperaturas son una amenaza real, que requiere una actuación rápida, profesional y decidida. La noticia también pone de relieve el compromiso social de las fuerzas de seguridad.
