El parón de toda la actividad decretado por el Estado y las continuas lluvias han retrasado la finalización de las obras antiinundaciones de la urbanización La Dorada. El pasado lunes se reanudaron, con la reactivación de las actividades esenciales contempladas en el Estado de Alarma, aunque con más lentitud de lo esperado por los abundantes días lluviosos de este año.
Es una de las obras más necesarias y esperadas por los vecinos de Los Alcázares, ya que tienen como objetivo evitar las repetidas inundaciones en la urbanización La Dorada y su entorno, que ya han causado cuantiosos destrozos en el casco urbano, tanto en las viviendas como en las vías públicas y en instalaciones municipales como el centro de atención a la infancia.
Con el retorno de parte de la actividad, el pasado lunes los operarios volvieron a arrancar las máquinas de la obra, que cuenta con un presupuesto de 830.000 euros cofinanciados al 50% por el Estado y el Ayuntamiento, y que tiene un plazo de ejecución de 5 meses.
La segunda obra prevista para aminorar las riadas será la ampliación del canal D-7 que recogerá gran parte de las escorrentías. La Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) financiará la mitad de los 4 millones de coste.
«Esperamos que se licite nada más terminar el Estado de Alarma», afirma el alcalde, Mario Pérez Cervera. La otra obra fundamental para evitar la llegada de toneladas de barro con cada episodio de lluvias es la ampliación de la red de recogida de pluviales de la ‘zona cero’, con un presupuesto de un millón de euros y el compromiso de la Comunidad Autónoma para financiarla.
Las obras antiriadas, de nuevo en marcha en la urbanización La Dorada.
