«No teníamos registro anterior en la Región de la presencia de ningún flamenco enano», afirma el biólogo Ángel Sallent, especialista en aves y miembro del Grupo de Anillamiento de la Asociación de Naturalistas del Sureste (Anse). Hace pocos días, observando las colonias de flamencos de las salinas de San Pedro del Pinatar, distinguió a un ejemplar de flamenco enano, llamativo por su pico totalmente rojo y su plumaje de un rosa intenso.
El experto cree que el ejemplar de flamenco enano es «un divagante, como llamamos a los individuos que se separan y viajan a otras zonas en solitario». «Los que se pueden ver por el norte de Europa suelen proceder de las colecciones de los zoológicos, pero los que se ven por el sur llegan directamente de sus hábitats en África subsahariana«, explica el biólogo. «Localizan una zona de individuos similares y pueden quedarse», afirma Sallent.
Es difícil saber desde cuándo se encuentra en el Parque Regional de San Pedro, pero el experto asegura que «puede vivir allí muchos años integrado en la colonia, aunque como reproductor ni tiene futuro». El flamenco enano es una especie abundante al sur del Sáhara. Su comportamiento es similar al de los flamencos. «Tiene un pico grande, con unas barbas que filtran los macroinvertebrados«, explica el biólogo.
A finales de marzo comenzará con la campaña de anillamiento en isla Grosa con motivo de la migración de aves de primavera, cuando suelen desplazarse a las regiones del norte huyendo del calor del verano. Sallent coordina además la campaña de monitorización de las gaviotas del Parque Regional de las Salinas, que ha demostrado la diferencia de comportamiento entre las patiamarillas, más numerosas en la zona, y las de Audouin.
«Las patiamarillas se suelen quedar por la zona, aunque muchos jóvenes se fueron. Uno llegó al Algarve y de allí voló a Tanger, donde debió morir porque la señal paró en un punto. Otro llegó a la ría de Aveiro», cuenta. Las rutas de la gaviota de Audouin «tienen la invernada en la costa sahariana y la mayoría viajó a Mauritania, dos se quedaron en el mar de Alborán y algunos pollos viajaron a Senegal», explica Sallent. Estas especies están empezando ya a voler al parque salinero. «A mediados de abril ya estará formada de nuevo la colonia», explica.