Ni los vecinos ni los profesionales, y tampoco los voluntarios, olvidarán nunca los tres días de diciembre de 2016, cuando las mayores lluvias torrenciales de la historia de Los Alcázares puso en peligro vidas, hogares y el transcurso de la historia para los vecinos de este municipio costero, que vio cómo el agua superaba los dos metros de altura en las calles del centro.
El Ayuntamiento de Los Alcázares convocó el domingo un acto de gratitud a las dos mil personas, entre profesionales y voluntarios, que ayudaron a salir del doloros trance a los vecinos, algunos de ellos atrapados en tejados para protegerse del agua.
En el acto, el alcalde de Los Alcázares, Anastasio Bastida, entregó más de 150 reconocimientos, junto al presidente murciano, Fernando López Miras, el delegado del Gobierno, Francisco Bernabé, y la presidenta de la Asamblea Regional, Rosa Peñalver, un afectado y un voluntario de aquellos días de la riada.
Entre los homenajeados se encontraban las direcciones generales de Emergencias y Seguridad Ciudadana, Juventud, Deportes, y servicios de Protección Civil de más de 20 municipios. También recibieron sus placas de reconocimiento la Universidad Católica San Antonio, el Centro de Tecnificación Deportiva Infanta Cristina de Los Narejos, la multinacional Carrefour, el servicio de emergencias 112 y numerosas empresas del municipio y asociaciones de vecinos, deportivas, culturales y religiosas.
El presidente regional hizo entrega al alcalde de un vehículo de emergencias, tipo 'pick up', para sustituir al el servicio de Protección Civil perdió con las riadas.
Entidades civiles y militares participaron en el rescate de los vecinos durante las riadas.
López Miras entrega las llaves del coche de Protección Civil al alcalde, para suplir el que se perdió en las inundaciones.
