Ya lo han perdido todo varias veces por la intrusión imparable del agua. Los vecinos de Los Alcázares lamentan que, un año después de las peores inundaciones que se recuerdan, y ante el aviso amarillo por tormentas a partir de la medianoche de hoy, jueves, "todo han sido promesas y ninguna realidad" sobre las esperadas obras aniinundaciones, señala el portavoz de la asociación Stop Inundaciones, Santiago Pérez Blaya.
A pesar de que la alerta amarilla activada por la Agencia Estatal de Meteorología no anuncia lluvias como la DANA de septiembre de 2019, Pérez Blaya no se fía porque "en los últimos cuatro años las cantidades anunciadas poco han tenido que ver con lo que luego pasó".
Y es que Los Alcázares no tiene que protegerse solo del agua que le cae del cielo, sino además de la que le baja desde la sierra de Murcia y todo el campo de Cartagena en su camino hacia el Mar Menor.
SOLUCIONES POR LLEGAR
"Todo está aún sin terminar y para cantidades de poca agua", explica el portavoz. Ni siquiera la ampliación del canal de drenaje D-7 está realizada. El presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), Mario Urrea, anunció a principios de noviembre en el Consistorio de Los Alcázares que la adjudicación sería "en breve".
Para Pérez Blaya, "es necesario encauzar la rambla de Torre Pacheco para evitar la acumulación de agua en el casco urbano", pero tampoco hay noticias de tal proyecto. "Todo son promesas, que luego chocan con el conflicto de las competencias, y así llegamos a que con 4 años con el PP y dos con el PSOE lo único que hemos conseguido son promesas", denuncia el portavoz.
"Mucho me temo que el problema del Mar Menor, con esas cantidades de aguas cargadas de nitratos que le llegan, se nos va a enquistar como lo de Portmán, porque lo han convertido en un problema político", asegura.
"YA SOLO QUEREMOS QUE DIMITAN"
Para la portavoz de la asociación Saldremos a flote, Nuria Cárdenas, "todo son excusas, retrasos y licitaciones que no llegan". Cree que "han hundido a este pueblo, los vecinos están derrotados y ya nadie piensa en levantar un negocio". Han perdido la confianza en que lleguen soluciones para frenar el agua. "Esto no hay quien lo frene porque el problema de Los Alcázares viene de arriba. Hace un mes apenas llovió y sin embargo las calles se llenaron de agua", alerta Nuria Cárdenas.
Cree que "los políticos están jugando al ping pong con nosotros". "Ocupan cargos desde los que podrían hacer mucho bien, pero en cambio hacen aeropuertos que no hacen falta y abandonan a este pueblo", afirma.
Ante la falta de soluciones, los vecinos han recurrido a aplicar sistemas caseros de protección. Muchos han instalado sistemas de rieles verticales para colocar compuertas que eviten la entrada en tromba de agua. Otros recurren a los baldos con yeso para levantar empalizadas en las puertas. Esta noche volverán a llevar los coches a las zonas altas. "Toca quedarse sin dormir", cuenta una vecina.
