Después de varias décadas de accidentes y de reivindicaciones vecinales para corregir la rotonda de Pozo Aledo, una obra de la Comunidad Autónoma mejorará la seguridad en la circulación y añadirá el reclamado enlace con la autopista AP-7 en sentido Cartagena.
La rotonda de Pozo Aledo, un punto crítico de la red de carreteras del Mar Menor, ganará en seguridad y fluidez de tráfico. Por este nudo de viales circulan 8,3 millones de vehículos al año, y se producen retenciones por los numerosos vehículos que llegan o se marchan de la costa del Mar Menor. Está considerado uno de los puntos negros de la Región, ya que ha registrado colisiones con resultado de muerte. Una plataforma vecinal reclamó durante años los cambios que permitan mejorar la seguridad.
Hace unos años se rebajó la altura de la rotonda para mejorar la visibilidad. Y en 2020, se amplió el paso peatonal bajo la autopìsta, que antes se inundaba constantemente y provocaba inseguridad en los vecinos por la falta de iluminación.
El nuevo proyecto prevé invertir 453.000 euros en reordenar la circulación en la rotonda, para que una vez dentro, los coches no tengan que ceder el paso a los que acceden desde la autovía del Mar Menor, como hasta ahora.
Se instalarán señales de ceda el paso para los vehículos que bajen desde la autovía, de modo que tendrán prioridad de paso los coches que circulen por la rotonda.
Además, se creará un enlace desde la rotonda hacia la autopista AP-7 con un doble carril en sentido Cartagena y un carril directo hacia Murcia. "El enlace con la AP-7 descongestionará el tráfico en el interior del casco urbano", señala el alcalde de San Javier, José Miguel Luengo.
