Enagás Renovables, la productora independiente de gases renovables, construirá en San Javier una de las tres plantas de producción de biometano proyectadas en la Región. Cerca de El Mirador, se levantará el complejo que convertirá los residuos agrícolas y ganaderos en biogás, que tras un proceso de depurado se convertirá en biometano compatible con la red de distribución de gas natural que se surte a los hogares.
San Javier se convertirá en uno de los centros de producción de esta fuente de energía renovable, que será cada vez más necesaria en un mundo hiperconectado, con millones de pantallas y dispositivos tecnológicos. Las otras dos plantas se construirán en Las Torres de Cotillas y Santomera. Empezarán a funcionar en 2027 y serán tres de las 10 plantas que Enagás tiene previsto poner en marcha en toda España.
La inversión prevista en San Javier asciende a 30 millones de euros para convertir una parcela de 6,5 hectáreas, ocupada por una planta de dos hectáreas en un complejo de producción de biometano. La fábrica de gas verde dará empleo a 15 personas y generará un centenar de empleos indirectos, ya que la compañía conectará con proveedores locales y mantendrá alianzas empresariales.
La elección de San Javier y de las otras ubicaciones ha estado determinada por un lado por la cercanía de granjas ganaderas y explotaciones agrícolas, que son las que generan los residuos orgánicos a transformar en biogás y en fertilizantes. Por otra parte, Enagás ha escogido localizaciones cercanas a la red gasística en la que tendrá que volcar el biometano resultante.
Las tres plantas proyectadas por Enagás en la Región, en cifras.
La planta de San Javier producirá 73 gigavatios al año, suficientes para cubrir las necesidades de consumo de unas 20.000 viviendas. Entre las tres plantas de la Región, Enagás prevé generar más de 200 gigavatios al año, es decir, un volumen capaz de cubrir las necesidades energéticas de 50.000 viviendas.
Para el CEO de Enagás Renovables, Antón Martínez, "la Región tiene unas condiciones excepcionales para producir biometano por su industria ganadera y agrícola, por su mentalidad emprendedora y por el apoyo decidido de la administración". El CEO destaca la agilidad que ha dado la Unidad de Aceleración de Inversiones (UNAI) del Instituto de Fomento a los trámites para iniciar en breve los tres proyectos.
La compañía calcula que la Región tiene potencial para acoger hasta 40 plantas de biometano por el elevado volumen de residuos orgánicos que genera y por el alto consumo de fertilizantes de su industria agraria. Esta red de plantas produciría 3,5 teravatios al año de energía renovable, que equivaldrían al 13% de la demanda de gas en la Región.
