La procesión del Santo Entierro, acto central de la Semana Santa pinatarense, congregó de nuevo a miles de fieles y nazarenos. Más de una decena de hermandades y cofradías, formadas por tronos, numerosos nazarenos, manolas, peintentesl el tercio romano, y bandas de cornetas y tambores. Esta procesión, que de forma organizada comenzó a celebrarse a principios de la década de los cincuenta, tiene sus orígenes en el siglo XVIII.
Las marchas procesionales guían a los tercios de nazarenos en medio de la solemnidad y las diversas manifestaciones de la oración y la fe. Un piquete de la Policía local abrió este desfile de Viernes Santo, seguido por el estandarte de la Agrupación General del Cabildo. La primera imagen de la procesión fue el Santo Grial, seguido de la Oración en el Huerto, Jesús de Medinaceli, los Apóstoles Santiago y San Pedro y la Piadosa Verónica.
El cortejo se completó con las cofradías de Nuestro Padre Jesús Nazareno, el Santísimo Cristo del Perdón, la Virgen de la Piedad y la Santa Cruz Desnuda, ambos acompañados por decenas de manolas. El Tercio Romano abrió paso al Santo Sepulcro, seguido por la Virgen de la Soledad, que procesionó este año pro primera vez en la noche de Viernes Santo.
